Rector llama a defensores de migrantes a tener autocuidado y acompañamiento

Vie, 20 Abr 2018
Se realiza el VII Encuentro Ellas y Ellos Tienen la Palabra, un dialogo entre defensores y defensoras de las personas migrantes
  • Mtro. David Fernández, Rector de la IBERO (Valentina González/IBERO).
  • Patricia Eugenia Zamudio, profesora investigadora del CIESAS-Golfo (Valentina González/IBERO).

El Rector de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, Mtro. David Fernández Dávalos, llamó a las y los defensores de las personas migrantes y refugiadas al autocuidado y acompañamiento, pues frente a la adversidad y a los nuevos desafíos, resistir con suficiencia, alegría y capacidad es resistir políticamente a una maquinaria que aplasta, que dificulta y que frustra.

“El contexto ha cambiado, tenemos muchos más fenómenos de refugio, de búsqueda de residencia permanente, de trabajo, lo cual modifica las tareas que los albergues y los grupos que acompañan a las personas migrantes tienen que realizar. Además, hay crecientes amenazas provenientes de fuerzas policiacas como del crimen organizado”, señaló el Padre Fernández durante la clausura del 'VII Encuentro ellas y ellos tienen la palabra, un dialogo entre defensores y defensoras de las personas migrantes'.

Ante los nuevos desafíos que se tienen en torno al acompañamiento de personas migrantes y refugiadas, en donde los defensores de migrantes lidian cotidianamente con amenazas, presencia de personas sospechosas o amenazantes, el Rector explicó que el autocuidado y el acompañamiento garantiza la permanencia del equipo y del proyecto; así como la unidad del equipo, necesaria para ser eficaces y evitar fricciones. Además, permite tener atención de calidad y escucharse unos a otros.  

“Cuando uno está pleno e íntegro puede atender a otras personas, pero si vive dificultades -como depresión o estrés- es más difícil poner atención y ser cálido con los demás. Garantizar la profundidad humana y el crecimiento como persona también es necesario, de otra manera vamos respondiendo automáticamente y no dejamos que pase por nuestro corazón y entrañas lo que estamos viviendo y se convierte en respuestas que no nos ayudan a crecer”.

El Rector agregó que el autocuidado y el acompañamiento se ha convertido en una necesidad organizativa y social para brindar el servicio que ofrecemos y en una necesidad política porque frente a la adversidad, frente a los desafíos nuevos resistir con suficiencia, alegría y capacidad es resistir políticamente a una maquinaria que aplasta, que dificulta y que frustra.

Durante el encuentro, cuyo tema fue 'Cuando acompañamos defendemos lo que amamos, por eso nos cuidamos', Patricia Eugenia Zamudio Grave, profesora investigadora del CIESAS-Golfo, señaló que la criminalización de los defensores y defensoras de las personas migrantes va de la mano con la criminalización de migrantes.

“Los ataques a migrantes tienen que ver con los ataques a nosotros porque estorbamos y nos atacan. La criminalización es mutua, estamos en la mira de una manera negativa. Hay una política en contra de los defensores para que pierdan legitimidad, la base de nuestro trabajo”, señaló Zamudio, quien invitó a los presentes, a poner atención en los incidentes de inseguridad, amenazas y ataques que reciben; pues cada vez hay más obstáculos y es importante estar alerta.

Explicó que la emoción que más viven los defensores de migrantes es la frustración, que deriva de la injusticia y la impunidad. “Vemos logros y después retrocesos. Siempre vamos a trabajar con cierto grado de frustración en nuestro trabajo, se tiene que asumir, pero no normalizar.

“El autocuidado es para todos. Y se tiene que reconocer que el compromiso es porque tenemos una historia y al reconocerla conformamos una historia colectiva que nos permite sentirnos acompañados y comprendidos. Y pensamos en que podemos encontrar soluciones colectivas. Reconocernos es encontrarnos”, dijo Zamudio.

Como conclusión, la Mtra. Mariana Zaragoza, coordinadora del Programa de Asuntos Migratorios (PRAMI), pidió a los defensores y defensoras de migrantes distribuir el trabajo, fortalecerlo, tener análisis, acompañamiento y cuidados.

Valentina González/ICM

 

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