#CRÓNICAIBERO El eclipse total de Luna, un fenómeno múltiple en el cielo

Lun, 21 Ene 2019
Las condiciones climáticas permitieron apreciar el eclipse, la superluna y la luna de sangre
  • (Cortesía Centro Astronómico Clavius)
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Por: 
Dra. Lorena Arias Montaño, coordinadora de actividades del Centro Astronómico Clavius de la IBERO

El eclipse sucedería, de eso no había la menor duda. La interrogante que preocupó en días pasados fue si las nubes nos permitirían verlo. Aunque enero, y en general el invierno, se caracteriza por un buen cielo, los recientes frentes fríos causaron días brumosos y nublados en la Ciudad de México. Afortunadamente, la mañana del domingo 20 de enero trascurrió con el Sol en todo su esplendor y alentó la espera, con muy buenas expectativas, del fenómeno astronómico que estaba por venir: un eclipse total de Luna.

Como sucede en un eclipse de Luna, nuestro satélite está en fase llena. Unos minutos después de las 6 p.m., cuando el Sol estaba listo para ocultarse en el horizonte del oeste, la Luna apareció en el este para iniciar su ascenso en la bóveda celeste. La luna llena siempre nos da la impresión de estar más grande cuando se encuentra cerca del horizonte, y aunque esta vez había una razón para justificarlo, ya que se trató de una Superluna (menor distancia entre la Luna y la Tierra), esto en realidad se trata de una ilusión óptica.

A las 8:37 p.m. el eclipse penumbral inició con la Luna lo suficiente alta en el cielo para no ser obstruida por el paisaje urbano, pero hubo que esperar casi una hora para poder notar la sombra de la Tierra que poco a poco iba cubriendo el disco lunar, esto era ya el eclipse umbral. A las 22: 41 p.m. la Luna estaba de lleno dentro de la región oscura y se pudo apreciar la llamada luna de sangre.

Un cielo despejado y una luna llena disminuida drásticamente en brillo, nos hicieron disfrutar también de un cielo estrellado. Orión, el Can Mayor y Tauro, constelaciones representativas de esta época, flanquearon en todo momento a la Luna; Castor y Pollux, de la constelación de Géminis, fueron las estrellas brillantes más cercanas a ella.

Cerca de la medianoche, la sombra empezó a perder terreno y para la 1 a.m., ya del lunes 21, la Luna recuperó su brillo, aunque el eclipse por completo finalizó a las 1:48 a.m.

No tendremos otro eclipse lunar visible en la CDMX en lo que resta del 2019, pero el 11 de noviembre podremos ver otro tipo de eclipse: la diminuta sombra de Mercurio cruzando el disco del Sol.

lorena.arias@ibero.mx

 

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